El lobo y el perro

Os voy a contar una fábula que seguro que os gusta.

Érase una vez un perro que vivía en una granja, él era flaco y débil, pero era muy listo. Un día el perro decidió ir a buscar comida. En medio del camino se le cruzó con un lobo bastante fuerte. El lobo pegó un salto y cogió al perro de sus pies dejándolo inmovilizado. El lobo le dijo al perro que tenia hambre que no había almorzado y que queria comérselo. Al perro le pareció absurdo que un lobo fuerte y de gran porte se quisiera comer a alguien como él, que nada más tenia huersos y pellejo. El lobo le dijo que no pasaba nada que mejor era algo que nada. El perro al oir eso le hizo una propuesta y el lobo puso oido. El perro le dijo que dentro de quince dias se casaba la hija del dueño de la granja e iban a hacer una boda por todo lo alto, al perro le dio mucho apetito. El perro le dijo al lobo que se esperara a que pasara la boda que comeria un montón y se pondria más gordo y más apetitoso para comer. El lobo razonó y le dijo que vale, que se esperaria a que terminara la boda y ya se lo comeria.

Pasados los dias el lobo se acercó a la granja, el perro lo vio y lo llamó y le quiso presentar a su amigo llamado Matalobos, un perro bastante astuto y fuerte. El lobo se asustó al oir el nombre del perro y salió corriendo. Al final el perro flaco se salió con la suya, pero el lobo mientras estaba huyendo se le vino a la cabeza un refrán que decía:

Más vale pájaro en mano que ciento volando.